
Fines de Enero un calor asqueroso y una trabajando bien cerca de un mechero intentando que esta vez (la tercera) los benditos fungis se dignen a crecer sin contaminación...a veces pareciera que el universo conspira contra mi queriendo decirme algo que muchas veces tardo en entender, espero que esta no sea una de esas veces. En fin, como todo en mi vida, este condenado proceso de titulación tendra que ser leeeento pero seguro, al igual que mi divorcio, el cual ha tardado bastante más de lo esperado. Parece que todo el mundo estaba esperando la ley porque apenas se aprobó los tribunales colapsaron y aunque ya se presento el acuerdo tengo fecha para julio o agosto, asi que me quedan todavia unos meses de Señora, para luego dar paso a la BIENVENIDA SOLTERÍA. Mientras tanto seguimos capacitandonos con uno que otro diplomado, hasta poder optar por un grado ya sea una maestría o mejor aún un doctorado; de esta forma voy orintando hacia donde quiero que vaya mi vida laboral. En lo sentimental mejor ni hablar. Estoy pasando por un período de introspección, intentando definir que es lo que realmente quiero, aunque ya se encuentra en el presente el hombre que creo es el indicado, aún no me atrevo a dar el salto y dejarme caer en ese vacío tan exquisíto que es el amor, los sufrimientos de relaciones pasadas dejan marcas demasiado profundas que cuesta un tiempo deshacerse de ellas y volverse una persona reciliente en ese aspecto. Por el momento cuento con el amor incondicional de mi hijo perro, él siempre está contento y se alegra cuando me ve, al menor estímulo me mueve su colita y no me demanada mas que cubrir sus necesidades básicas.
Se me ha hecho complejo el proceso de cambio de año, todavía me quedan algunas cargas innecesarias en la mochila, espero poder dejarlas pronto para seguir el trayecto con menos peso y más espacio para otras cargas interesantes que vayan surgiendo en el camino.