Maldita Primavera...

Sí, para mi se ha transformado en la maldita primavera…. Hace algunos años por estas fechas me encontraba afinando detalles de lo que sería EL GRAN PASO en mi vida, daría comienzo a mi propia historia, estaba llena de ilusiones, sueños y planes, miraba mi mano y veía en ella el símbolo de la unión, pensaba que era tan afortunada por haber encontrado a la persona que sentía era el amor de mi vida e ilusamente imaginaba que él también sentía lo mismo. Mi personalidad obsesiva quería que todo fuera perfecto, que cada detalle se respaldara en un significado, es así como le pedí a mis hermanos y amigos que fuesen los encargados de cantar en la iglesia, nos juntamos para escoger la música y canciones. Los partes debían ser diferentes (reflejo de cómo me he sentido toda mi vida), por eso los escogimos de color azul con caricaturas que nos representaban a ambos y a mis mascotas (Ty y Reina), además le agregamos una frase que en ese entonces nos reflejaba…mejor no acordase de eso. Ir a la peluquería a probar peinado, maquillaje y fijar el itinerario del proceso de “embellecimiento” (depilarse, exfoliaciones, manicura, etc). Comparar algo especial para la noche de bodas y las siguientes. Comenzar con el traslado de mis cosas personales desde la casa de mis padres a nuestro nuevo “hogar”. Cada día abrir un nuevo obsequio y darse cuenta, a través de algo tan material como un regalo, cuanto me conoce y quiere mi familia, no por la magnitud del presente sino porque se notaba que había sido escogido pensando en mi (triste, pero no pensaban en nosotros…seria un presagio!!!). Preparar el diaporama que regalaríamos a los invitados ese día. Y bueno tantos detalles que ya he olvidado (Degustaciones, Auto, Tortas, Cotillón, Fotógrafo, Video….Etc)
Llegó el gran día!... dormí por ultima vez en la que había sido mi pieza por muchos años y ahora estaba patas para arriba producto de la mudanza. Me levante, sentía que todo sucedía en cámara lenta, primero fui a buscar el vestido, como era tan aparatoso tuve que colgarlo en el patio para que no se arrugara, luego fui a buscar el ramo…me cargó, así que acto seguido partí al Terminal de flores a comparar un gran ramo de ilusiones, en el camino encontré unas rozas teñidas de lila que me fascinaron, por lo que decidí incluirlas. Siguiente paso, peluquería y maquillaje, ya a eso de las 7 de la tarde me encontraba totalmente vestida esperando que llegara el fotógrafo a tomar las fotos de rigor. Un hecho que me emocionó fue cuando estando ya casi lista, se acerca mi mamá y me pone sus preciados aritos de brillantes (siempre quiso unos y hacia poco tiempo que por fin los había obtenido) y me dice que ese es su regalo para mi, más allá de lo material significaba un gran acto de generosidad que ella me regalara algo que tanto había querido. Luego me puse un colgante que había sido de mi prima Carola (ella voló alto en 1996) sentí que de alguna forma era hacerla presente en un hecho tan importante de mi vida.
Por fin todos se fueron a la iglesia, me quedo sola con mi papa, nunca ha sido un hombre comunicativo, pero esta vez estaba mudo…y triste. Llegó la hora, salgo por ultima vez de mi casa como “señorita”, me subo al auto, el tiempo vuelve a pasar en cámara lenta, miro los edificios a medida que avanzamos, le pido a mi papá que me diga algo, me dice que no puede, miro sus ojos y como nunca antes en 25 años, noto que están repletos de emoción. Llegamos a la iglesia, mis amigos están afuera sacando fotografías informales, también me esperan Loly y mi madrina, quienes me ayudan a bajas y arreglar el vestido, puedo oír “el avenido”, música escogida para la entrada del Novio y padrinos, me paro en la entrada de la iglesia, se acerca Felipe (amigo encargado de coordinar los tiempos) y me pregunta si estoy lista, le respondo que si, el le hace una señal al coro y comienza a sonar en flauta traversa “el oboe de Gabriel”, entran mis sobrinos vestidos como dos pequeños novios, David llevaba las argollas, Catalina un hermoso ramo de flores lilas; camino por el pasillo del brazo de mi papá, voy reconociendo a mi familia y amigos, me dicen cosas lindas al pasar y sonríen con mucha emoción, miro hacía adelante y veo al hombre que había esperado tanto tiempo.